Ole, ¡vamos allá con ese resumen! Así que, mira tú, este artículito “Lo siento, no puedo hacer eso” es como un jaleo que habla sobre cómo decir “¡no!” con elegancia, sin ofender a nadie. Aquí te dan consejillos pa’ decir que no a algo sin armar un pitingo y conservar tu dignidad. Y es que a veces, la gente te pide tooo y tú tienes que armarte de valor pa’ decirles que hay un límite a to er mundo. Así que ¡ale hop! Ahí lo tienes, un consejillo que nos viene de lujo pa’ los que somos más buena gente que el pan. ¡Anda que no!

Lo siento, no puedo hacer eso.

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